El viernes por la mañana fue el colapso por colegios, que no digo que no puedan ir (mis excursiones escolares no eran tan chulas), pero la educación de los chavales es más que cuestionable (y la de algún profesor).
Así pues, llegué sobre las 10:30 con mis entradas compradas el día anterior tanto para ese día como para el sábado (eso ya es mala señal), sin mucho hype y con una lista de autores que no tenía nada claro si iba a poder completar. La primera de ellas era sobre las 15:30 así que pensaba dar una vuelta por los stands y exposiciones aprovechando que era un día tranquilo.
He de decir que hasta el mediodía estuve sola y me hizo recordar viejos tiempos en los que iba a mi bola y el tiempo no pasaba... fue todo aburridísimo porque la sensación de vacío era enorme, no solo de contenido sino de ambiente.
En la plaza Univers había una suerte de jaula para pequeños en forma de laser tag que no hizo de suficiente imán para los pequeños que correteaban como locos por ambos pabellones. Una vez dentro del pabellón principal di una pequeña vuelta para tener los stands que debía visitar para las firmas localizados y de paso preguntar si iban con cola o número.
En la entrada solo había un stand de películas, Fénix Oscura, cosa que agradezco y en el lado opuesto una especie de peana enorme y vacía con un fondo del Smash de Switch... es decir, unos asientos improvisados para mucha gente.
La parte más lejana, como siempre, estaba destinada a las editoriales de manga como Norma, Planeta o ECC siendo la primera ligeramente más grande que en el pasado saló del manga pero insuficiente y la última prácticamente yendo de lado a lado entre la parte de sus cómics Kodomo, la zona de la editorial base y al fondo una nueva zona destinada a vender originales preciosos, firmas de autores y espacio dedicado a su sello de crowdfunding, Spaceman Project al que visité bastante frecuentemente.
Ni siquiera entré en el stand de Panini, no tienen nada que me interesa, aunque aplaudo que sigan viniendo sin el castillo inexpugnable.
Otro que tampoco me interesa y que me agobia cuando se llena los sábados pero el peor de todos...
No era mega fan del anterior estilo pero se montan unos pollos dentro, entre la cola de cajas y la gente buscando las series es un horror, deberían plantearse un cambio porque en el del manga es horrible, el año pasado estaba con una montañita de tomos entre los brazos totalmente fuera del stand, vamos que de ahí a darme media vuelta había un paso.
Lo de ECC es increíble, stands por todos lados y esta vez con el extra de los originales y Spaceman que era el hub de sus firmas con los flamantes pases VIP como novedad de este año y viendo las fotos... es para pensárselo.
La zona de Nintendo llena de chavales más pequeña que de costumbre, Selecta, Penguin Random House...
una vuelta rápida por esa zona y luego me fui a la zona de librerías pero nunca suelo encontrar nada que me interese y con todo el material apiñado me da agobio hasta rebuscar. Las primeras colas se iban viendo en los stands de Astiberri, Universal... lo que vendría a ser mi tarde.
Aproveché para ir a ver un poco la zona de fanzines que ya da gusto visitar por el maravilloso cambio de situación y saludar a Núria y a Xulia a las que veo de evento en evento y un poco más allá estaba la zona de Comic Kids pero ya me pasaría en otro momento.
Me faltaba el otro ala del pabellón donde solo había tiendas de pops, posters y demás cosas que no me interesan en absoluto así que de ahí fui al pabellón de la comida y el eco.
Un pabellón deprimente con los cuatro stands de Star Wars y Star Trek, cuatro o cinco food trucks, un bar en medio, un escenario muerto y pocas mesas.
Este no tiene la afluencia del saló del manga pero la gente quiere sentarse y reposar de vez en cuando y la cantidad de mesas era totalmente insuficiente porque solo estaban en ese área.
El resto de los pabellones no tenían zona para sentarse, leer, hacer tiempo, ni siquiera las mesas con cómics para echarles un ojo.
Poco me quedaba por hacer y aun faltaba tiempo para encontrarme con Fran así que aproveché para visitar las expos del último pabellón.
La primera que pude ojear era la de Ana Penya, autora revelación de 2018 con un estilo muy particular y su obra Estamos todas bien.
Justo al lado estaba la dedicada a la mejor obra de 2018, Pinturas de guerra de Ángel de la Calle. No lo conocía de nada pero no estuvo mal.
Joso "The expo", repasando la obra de Josep Solana, dibujante especializado en humor gráfico y creador más tarde la la conocida "Joso" de la que han salido tantos talentos. Preciosa la mesa de trabajo.
Ahí ya flipé, una expo con un cartelito de +18 y con menores viéndolo con la profesora y la responsable al lado. Chavales diciendo "que asco" una relación entre dos mujeres, horrible, ni siquiera la profesora intentando explicar lo que estaban viendo... solo correr entre risas cuando se lo iban diciendo a sus compañeros y todos igual, con desprecio. Flipanding.
Estaba dedicada a Laura Pérez Vernetti y esta me gustó bastante más, una capacidad de cambio de estilo fantástica. La última foto es de mi ilustración favorita.
Finalmente, en la misma sala, Vibraciones underground: interferéncias entre comic y Rock'n'roll.
No me atrajo demasiado, pero las portadas de algunos discos eran preciosas.
La última de la zona era evidente a quien iría, el recientemente fallecido Stan Lee y un repaso a su prolífica obra.
Justo al lado había una exposición de autores españoles currando en USA como Merino, Pacheco o Ríos y una subasta de originales.
Hice pocas compras en el mismo salón, creo que el año en que menos he comprado pero aprovechando que los autores de Spaceman estaban con amplios horarios aproveché para pillarme Korokke y me firmó Josep Busquet, el guionista (que yo pensaba que era el dibujante).
Me quedaban las expos de la zona infantil y me sorprendió la de Lucky Luke, cogieron el tomo de "La diligencia" y cada página la hizo un dibujante a su estilo, a veces copiando la viñeta y otras con una reinterpretación. Me quedo con la versión shojazo y los furros.
Comí y ya nos acercábamos a las primeras horas de locura. Me puse a hacer cola para pillarle número a Fran para Keko y Altarriba y cuando llegó yo empecé a moverme.
Roc Espinet en Spaceman firmándome Chica y Lobo que me encantó y es super majo, no tenía ni idea de que era animador y que teníamos conocidos en común del mundo de los videojuegos, es un mundo pequeño.
Justo al lado estaba Enrique Fernández que me firmó Nima, luego veréis la maravilla que me dibujó.
No sabía lo que me iba a encontrar en la firma de Cristina Triana, a la que llegué tarde pero no había más que un chico así que charlamos un poco mientras me lo dedicaba, otra que parece extremadamente maja, espero que más gente se acercara a conocerla.
Siempre encantada de que Kenny se acuerde de mi primera en la cola y alucinando que media hora antes no hubiera llegado nadie, luego se hizo una pequeña cola de tiarrones, lejos de lo que debería atraer la serie de Telémaco XD
Es majo hasta morir.
Muy tranquilito estaba David Rubín, siempre incombustible y con una cola de morirse pero siempre divertido. Tardé bastante y ya estaba un poco cansada, esta cola fue agotadora.
Caro Waro también tocó rápidamente, una preciosidad de lineas y de haber leído antes la obra, le habría pedido otro personaje XD
Ya quería pillarme el de Nothin' Personal de Josep Busquet y Andre, los tenía al lado así que aproveché, ella es super maja, con energía para parar un tren.
Ya era tardísimo y no pensaba que pudiera llegar a Xulia, de hecho, ya había terminado y abusando de la confianza le pedí que me firmara el Ira, y con esto... morí.
Fran y Raulizga estuvieron a mi lado en más de un rato, pobrecitos que fueron un poco a remolque de esta locaza.
Por la mañana, no recuerdo cuando fue exactamenteysoymuyperraparapreguntar estuve un rato con Raulizga, se pasó para pillar Yona en el stand de Norma gracias al favorazo que nos hizo Fel de pillarse los 8 primeros tomos de la serie para pillar 4 cuadernos, si, así de enfermas estamos algunas... pero él me abandonó al rato.
Reitero que es importante ir con amigos, porque la mañana fue infernalmente aburrida, por suerte el sábado iba a tener compañía.
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