El día tranquilo, no solo pude ir un poquito más tarde porque ya tenía la firma de Kakizaki sino que en general estaba todo mucho más vacío. Aproveché la aun poca gente en el stand de Tomodomo para que Ana me hiciera una firmilla :D
Luego me acerqué a las exposiciones del pabellón de los niveles, que siempre está mal aprovechado.
La primera expo que te encontrabas era la dedicada a Kenneos, responsable del cartel del salón de este año y fallecida recientemente.
Luego teníamos un repaso a las obras de Jiro Taniguchi también fallecido este mismo año. No soy muy fan de él, todo lo que he leído no me ha gustado... pero eso no quita el pedazo de artista que se ha perdido.
Un poco más arriba estaba el de Fernando Casaus, ilustrador extremadamente variado y rico en estilos, hizo uno de los carteles del saló hace bastante tiempo.
Al poco vi que @Miyichi ya había llegado y fui a su búsqueda en la expo de Robico y Sukeno. Como siempre, los autores invitados por Norma tienen un rinconcito con ilustraciones varias y hoy se podía ver tranquilamente.
Estuvimos un rato con las @XiannuStudio viendo el juego (que pillaré en cuanto salga, enorme currazo que se han pegado todos los implicados), luego volveríamos con ellas para la sesión de firmas
Nos dirigimos al pabellón 5, con la expo de robots y esta vez pude hacer fotitos, estaba todo mucho más tranquilo.
Nos sorprendió mucho que estuviera Atom en vez de la evidente Astroboy...
Juguetitos de Mazinger a cascoporro en sorprendentes condiciones.
La hora de comer llegó y aprovechando que ambas teníamos que comprar comida nos fuimos a los restaurantes japoneses y terminamos con un par de menús de la parada de Ochiai que no estaban mal, un poco caro pero por lo que decían los de la mesa de al lado lo que tenían ellos no estaba demasiado bien.
Hicimos algo de tiempo y nos pusimos a la cola de los números para las Xian nu Studio. Estuvimos un buen rato ahí paradas y planeando el tema de Kamio el viernes, casi el único día que veíamos factible conseguirla.
Con nuestras preciosas firmas nos despedimos, sabiendo la locura que íbamos a hacer al día siguiente.
Ya en casa pude ver las licencias de Letrablanka, estaba tan rebentada que no me quedé. Una de ellas ya me la había chivado el propio Nacho Fernández:
- Pari no Suzukike- Los Suzuki en París, de Junko Kawakami. Serie de dos tomos que será recopilada en uno solo.
- Krysalis de Nacho Fernández. Como buena fan de este hombre, voy a comprar todo lo que saque, aunque esta parece un poco más infantil me da igual, lo adoro.
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