Conclusiones Post-Saló

Toda la blogosfera otaku ha hecho posts al respecto, compras y opiniones.

A parte de los comics he comprado 3 frikadas que no me esperaba encontrar y queria con ganas:

- Hucha Nyanko Sensei

Es el gato blanco de Natsume Yûjinchô, serie de la que me he enamorado y algun dia ya reseñaré.

Para la mesa del curro, ya que aun no tengo bastante mierda...

- Hucha gato

Posteé un video hace poco y finalmente lo he encontrado :) Deseosa de enseñarselo a mis gatos :P

- Locoroco rosa y verde

El rosa para mi y el verde para una amiga. No son los de la foto pero se parecen.

Lástima que no tuvieran más modelos, los vi de pura casualidad y no sabia que habia ese merchandising del juego, a ver si puedo encontrar el resto :P.

Por lo demás, el Saló justo me pilló cuando tenia que dejar mi piso, eso implicaba acabar la mudanza y limpiar a fondo... total, que solo pude ir el viernes por la tarde, pensando inocentemente que podria pillar una firma de Wataru Yoshizumi pero no. Muy mal por la organización de Planeta, si no ibas el viernes por la mañana a la hora de abrir era imposible conseguir número. Que les zurzan.

Peeeeeeero, pude conseguir las firmas de Nacho (Kung-Fu Mousse), Kenny Ruiz (2 Espadas) y Xian Nu Studio (Bakemono). Con otra pesima organización de la cola, con turnos como para la pescaderia pero sin orden... un kaos.

Así pues, acabé el viernes totalmente derrotada pero con lectura para parar un tren y mis chorri huchas. Volví el lunes por la tarde ya que después de más de un mes currando como una loca tanto en casa con el translado como en el curro cerrando un proyecto necesitaba un poquete de ocio y alguna ofertilla interesante. Poca cosa pillé, Nómadas y Las horas perdidas a 10€ ambos, el primer numero de Change123 a 3€ y sin enterarme de que Ivrea vendia sus comics a 5€ (y mira que lo avisaron por el facebook, pero al no ver carteles no pregunté).

El viernes fue horrible, no hay nada peor que ir solo, así que me plantearé no ir otros años si no voy en grupo. El lunes me lo tomé con mucha calma, solo estuve una horilla y media y me sentó bien desconectar un poco.

Otro Saló que pasa, que ha sido igual que los anteriores salvo por el plantel de invitados. Recinto que ya se queda pequeño, demasiados stands de merchandising igual, la chica de megafonia no era la de siempre (que soltaba alguna gracieta de vez en cuando) y poca cosa más... un megamercadillo que reparte atemporalmente abrazos.