Siempre he sido rotunda con una afirmación: los juegos clásicos molan (Y si son de super nintendo son infinitos).
Hoy escribo para hablar del amor. Hay 2 tipos de amor, el amor por lo clásico y el amor por las cosas nuevas.
Ejemplo de amor clásico:
Scott Pilgrim vs. the world: The game
Este juego para Live y Store está hecho con las deliciosas manos de Paul Robertson (del que debo hablar en otro momento). Y sus deliciosas melodias son de Anamanaguchi (los cuales componen con una NES hackeada, cosa que aun me parece más delicioso).
Como veis tiene un aire retro adorable, sprites muy trabajados con multitud de movimientos. El juego es el típico "machaca todo lo que veas en pantalla y no seas tu" y puedes usar mucho mobiliario para ello.
Tenemos hasta 4 jugadores en la misma partida y pudiendo hacer combos entre ellos. Multitud de referencias a otros juegos y como he dicho amor.
Amor musical.
Por otro lado tenemos el nuevo tipo de amor. Clasicos con estética renovada y totalmente acertada. Como claro ejemplo, Kirby's Epic Yarn:
Su nuevo diseño le ha dado un +20 de amor y la banda sonora un +30 de adorable. Como podeis ver, el gameplay ha cambiado un poquitin, ahora no tragas enemigos para ganar habilidades, son inerentes en ti y puedes modificar el escenario para avanzar. Un juego muy fluido y con cooperativo :)
Deseosa de tenerlo en mis manos.
Como veis, hay 2 clases de amor para mi, pero quizas el más importante, es el amor por el trabajo bien hecho.
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